Seguimos con la gastronomía existencial.
Hoy se ha inaugurado la temporada oficial de mermeladas.
Tengo un peral que da unas peras imposibles: pequeñas, duras y con bicho incorporado. Pues bien, gracias a mi hermano Carlos descubrimos que la mermelada sale increible. Peras en trozos, con monda y sin bichos, un limón, el mismo volumen de azúcar menos un poco, y un chorrito de aguardiente
De paso os enseño la fabulosa hamaca brasileira que me ha regalado Nieves de cumple. Biplaza, bimotor, envolvente... Y de un color precioso. Ya la tengo con el libro y las gafas dentro preparada para la siesta.
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| Peral más hamaca lectora. |
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